Laura Restrepo.
Demasiados héroes.
Alfaguara.
México.
2016.
257 páginas.
En 1983 fue nombrada por el presidente Belisario
Betancur miembro de la comisión negociadora de paz entre el gobierno y la
guerrilla M—19. Fruto de esta experiencia es su reportaje Historia de un
entusiasmo, sobrecogedor testimonio por el que recibió amenazas de muerte y
finalmente tuvo que emigrar de su país. Vivió el exilio político durante cinco
años entre México y Madrid, manteniendo contactos con el ala política del grupo
guerrillero M—19, intentando crear un nuevo foro de negociaciones. Su labor
concluyó en 1989, cuando el M—19 abandonó sus armas y se convirtió en un
partido de oposición legal, lo que le permitió volver a su país.
Ha trabajado en la Revista Cromos y ha sido editora,
entre otras publicaciones, de la revista Semana, actividad que alternó con la
escritura. En México colaboró como columnista en el diario La Jornada y en la
Revista Proceso.
Con la novela Dulce compañía resultó ganadora
del Premio Sor Juana Inés de la Cruz 1997 de novela escrita
por mujeres, que otorga la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. Ha
sido merecedora además del Prix France Culture, premio de la
crítica francesa a la mejor novela extranjera publicada en Francia en 1998, y
del Premio Arzobispo Juan de Sanclemente 2003, otorgado por los
alumnos del Liceo de Santiago de Compostela a la mejor novela en lengua
española.
En 2004 se da a conocer al público hispanoamericano
al obtener el Premio Alfaguara de Novela con Delirio.
Figura entre los autores latinoamericanos más
destacados del momento, y sus libros han sido traducidos a más de una docena de
idiomas. En la actualidad vive en Bogotá, donde acaba de ser nombrada directora
del Instituto de Cultura y Turismo.
«Pasado que no ha sido
amansado con palabras no es memoria, es acechanza. El problema había sido cómo
contarlo, y ahora creía descubrirlo: íntimo y simple, como una conversación a
puerta cerrada entre dos mujeres que recuerdan.»
Mateo y su madre Lorenza están acostumbrados a tenerse solo el
uno al otro. El chico creció en ausencia de su padre, Ramón, con quien la madre
había compartido una intensa —aunque invisible— vida de clandestinidad como
militantes de la oposición a la dictadura militar en Argentina.
Pero ahora Mateo es un adolescente atormentado por una pregunta
punzante que no halla respuesta en los recuerdos de la madre, marcados por el compromiso
político: ¿y si mi padre era una especia de héroe, por qué nunca quiso saber de
mí? Cuando madre e hijo emprenden un viaje en busca de ese padre perdido,
tendrán que enfrentarse a la revelación de un brutal secreto al que va a
referirse como «el episodio oscuro».
¡Hola,
mestizos! Como parte de la #SemanaPenguin este martes les reseño un libro muy
complejo y a la vez conmovedor, enigmático e inesperado: Demasiados héroes por una de las mejores escritoras colombianas de
la actualidad, Laura Restrepo. (Todavía
no me perdono el hecho de mi inasistencia a su ponencia en la FIL Guadalajara).
Mi
primer contacto con la autora fue gracias a las críticas y reseñas de grandes
autores como Mario Vargas Llosa y, por supuesto, mi querido Gabriel García
Márquez. Cuando leí que la novela se
ambientaba en la dictadura militar argentina, en los opositores y en los
secretos familiares de un joven, su madre y su padre, quedé completamente
atónito, maravillado, por la habilidad novelística de Restrepo.
Voy
por partes: la novela inicia con Mateo, hijo de Lorenza, quien busca la verdad
sobre su padre Ramón y el llamado “EPISODIO OSCURO”—un
elemento que me mantuvo en vilo durante toda la narración—. Para hacer el
asunto más difícil, los diálogos entre madre e hijo logran una tensión
sorprendente, hasta el punto de hacerme dudar sobre su realidad o ficción.
En cuanto al panorama, Laura movió muy
caprichosamente los hilos. No quiero decir que no sabía escribir sobre la
historia argentina, los partidos y la resistencia, sino que suelta pistas, a
veces de manera muy autobiográfica/militarista para inmiscuir al lector en el
misterio del joven Mateo y de su madre, un elemento que me encantó porque jugó
con mi mente y mis hipótesis.
(Pregunta
seria: ¿ustedes también hacen notas y conjeturas al inicio? Pues en mi caso, mi
libro se llenó de notas. No me arrepiento de nada.)
Ahora, ¿qué me pareció la relación madre
e hijo? Como mencioné al inicio, fue VERTIGINOSA. O sea, son figuras en
construcción con secretos que nunca terminan de contarse. Si a lo anterior
añadimos a los personajes secundarios y a las dirigentes históricas y lo que
ambos tienen que hacer para protegerse, los sentimientos fueron creciendo hasta
lograr un apego y un nudo en la garganta que pocos libros logran.
—Huérfana de tu hijo—le respondió Gabriela—, conozco esa triste figura.
En conclusión, Demasiados héroes es una novela perfecta que mezcla realidad,
suspenso y humanidad con la historia de héroes arrebatadores en búsqueda de un
destino que ni ellos mismos terminan de concebir. Esa esencia de incertidumbre
fue lo que me cautivó al cien por ciento, lectores y por ello se lleva los
cinco tridentes sobre cinco J y el puesto de mis mejores lecturas de TODA
LA VIDA.
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