¡Hola, mestizos! Bienvenidos a una reseña más del blog. En esta ocasión les reseñaré una obra que había estado esperando desde que inesperadamente descubrí que sería la secuela de El Psicoanalista, aquel thriller que me cautivó y me convenció de hacerme un fanático de los libros de Katzenbach. ¿Logró colocarse este libro dentro de mi top de favoritos del autor? ¡Descúbranlo a continuación!
Alzó los ojos hacia la creciente penumbra y se preguntó en qué se había convertido, porque no encontraba una palabra que lo describiera.
Jaque
al psicoanalista sitúa su acción después de cinco años desde los sucesos de
El psicoanalista, uno de los
thrillers más vendidos y sonados de los últimos años. El argumento de esa
historia, para quienes no lo sepan, gira en torno a una carta que alienta al
suicidio del protagonista, el doctor Starks, por un enemigo que poco a poco lo
orilla a ese fatídico fin. Esta continuación sitúa al protagonista cara a cara
con esos enemigos del pasado de quien a duras penas se libró, solo que en esta
entrega son ellos quienes lo buscan para pedirle ayuda; hay una amenaza
asediándolos, y el doctor no puede dar un «no» por respuesta.
Aunque
el inicio parece un poco flojo —pues se describe la vida que llevó el doctor
Starks después de los últimos eventos—, la forma en que se va desarrollando la
intriga es de aplaudirse. El autor va soltando dosis de suspenso y adrenalina
insertando al lector en una historia tenebrosa, inquietante y donde nada es
certero. Más o menos a la mitad del libro existe un giro argumental que nunca
se ve venir y que me sorprendió en magnitudes extremas, pues Katzenbach jugó
con mi mente y con mi concepción del rumbo de la historia.
En cuanto a los personajes, debo
admitir que Katzenbach se ha superado. Cada uno me pareció mejor explorado en
su naturaleza psíquica y con una «respuesta» más natural a las diferentes
condiciones de su entorno. Asimismo, disfruté mucho de sus diálogos, de su construcción
y de la naturalidad con la que fluían. Stephen King quedaría callado si lo
leyera (recuerden que lo criticó fuertemente en ese aspecto en su libro Mientras escribo).
Otro aspecto que me encantó fue que la
historia es diferente a la propuesta en El
psicoanalista, desde las acciones de sus personajes hasta su
comportamiento, pero sin perder la esencia de ese thriller tan icónico. Los
escapes del doctor Starks en este libro son cardiacas, ingeniosas y me pusieron
en vilo en más de una ocasión. Los lazos que crea el protagonista, los sentimientos
que desarrolla y cómo se movió dentro de la historia y de su conflicto me
convencieron del todo.
Asimismo, los espacios que retrata el
novelista son muy evocadores, con descripciones muy acertadas. Sentí durante el
relato esa atmósfera del pantano y de los escabrosos hechos ocurridos en él.
También ocurrió con los demás, en especial con Nueva York, ciudad que mientras
se describía se aunaba el talento de la prosa tan macabra de Katzenbach con la
poesía de su estilo.
En conclusión, Jaque al psicoanalista se coloca dentro de mi top del autor por su capacidad de reflejar los entresijos mentales de sus personajes, por los giros de trama tan inesperados y los cuidadosos y pulcros diálogos que lograron mantener la tensión constante. De principio a fin, Katzenbach logra sorprender, contagiar el nerviosismo y la adrenalina en los diversos escenarios que nunca dejan adivinar el desenlace.
![Nunca [pero después]](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgwk6ZtudwzE1ka8E1nLpiHE5JvUOpGrUr70O0WkjvAtiIp7y0gagyhNwvOe3yM56o0BYbLzulsyjukClDeG7Gz09K7mFxnrWx0ZW0W_B8j1a8cbqXKY0JZ43wpUbtHMyE3zh3U_vduQnJe/s1600/Untitled+design+%25283%2529.png)
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